La cancha de Gandía sigue siendo maldita para el Jovens en competición oficial. Y eso que si alguna vez podía ser propicia para una victoria, el sábado se dieron casi todas las circunstancias para que esa maldición se rompiera.
El Jovens dominó casi todas las facetas del partido desde el primer segundo de partido, endosando un parcial de 0-9 de salida a los discípulos de Quique Roig, pese a que los locales salieron con toda su artillería de inicio, incluyendo 2 americanos de renombre como Miller y Rosemond, y Daniel Martí (dos veces MVP en lo que va de Liga)
Babic dispuso una muy buena defensa a los hombres interiores de Gandía, que tuvieron muchos problemas para circular el balón y tan sólo conseguían mantener mínimas diferencias en el marcador a base de los tiros exteriores de Daniel Martí. Claro que la defensa sufrió las consecuencias, y tanto Andreu Jiménez como Jordan Kaspers y Marek Cwelich, llegaron al tramo final del partido con 4 faltas personales y con apenas recambios en el banquillo.
Y en esas circunstancias emergió la figura de Miller, quién aprovechó el peso de las faltas de los pívots de Almàssera, y sobre todo Kevin Navarro quién con un gran acierto en el tiro exterior en los minutos finales, decantaron la victoria por el bando local.
No obstante, hay que volver a destacar la buena imagen que dieron los nuestros ante uno de los mejores equipos del grupo, donde el trabajo de equipo destacó ante las individualidades y donde sólo la poca profundidad del banquillo privó al Jovens de una victoria que hubiera sido merecida
La próxima jornada el Cartagena rinde visita a la cancha de Almàssera, un equipo de mucha calidad que en las últimas jornadas ha visto truncada su buena racha inicial.